El bibelot de la Selección Cubana

DE AYER Y DE HOY
Por Jayalía Carlos

(Estrenamos hoy una nueva sección de un gran conocedor y vividor de la pelota cubana)

Es la Época Gloriosa del béisbol amateur en Cuba. Ese sábado, desde temprano, hay gran expectación y excitación entre los fanáticos del pequeño pueblito de Regla.
El team local se bate contra uno de los equipos mas poderosos de la Liga, nada menos que los temibles toleteros de la Perla del Sur: Cienfuegos. Y, como si eso fuera poco, en la lomita de los "invasores" estará nada menos que uno de los mejores lanzadores del momento: El casi invencible Guajiro de Laberinto... el Gran Conrado Marrero.

La fanaticada va entrando en el Stadium Galban Lobo desde muy temprano. Todos quieren agarrar los mejores asientos del Stand. Muchos estan atentos y nerviosos al momento en que entre en su territorio la caravana de Ómnibus con la tropa enemiga y sus docenas de secuaces.
Los fieles fanáticos cienfuegueros que no se pierden un game de sus héroes y viajan a cualquier lugar de la Isla para darles el apoyo moral de saber no estan solos en medio de la turba contraria.

Desde temprano, ya los vendedores y el Bar del Stadium están listos para recibir a la multitud y ofrecerles su mercancía.
Los mostradores del Bar llenos de barriles de cerveza: variedad para todos los gustos:...Polar, Hatuey, Tropical, botellas de ron, aguardiente, anís, etc. Los cócteles, los jaibolitos, el agua mineral, refrescos, dulces, y para los no bebedores gaseosas, Coca Cola, Jupiña, Piñita Lanio, Malta Hatuey, Materva, batidos de mango, de guanábana, de fruta bomba, de Leche Malteada.

Por alla el vendedor de churros calentando el aceite en la enorme paila. Los vendedores ambulantes recorrriendo las Graderías con su caja de cristal en la cabeza ofreciendo a los glotones Coquitos Quemaos, Boniatillo, frituras de bacalao, Natilla, Dulce e Coco, Mojon de Negro, Kusube, Maní Tostao, panetelas borrachas, pastelitos de guayaba, de carne, de queso.

En fin: una verdadera Cornucopia de Manjares criollos.
Eso sin contar la Guarapera donde ya el trapiche suelta por chorros el sabroso guarapo frío de nuestra inigualable caña de azucar... (CONTINUARÁ)