Un tema espinoso

Víctor Huerta
Ingeniero cubano y fanático pelotero
Residente en Talca, Chile

De más está decir que la selección nacional se basa en un 1 % en rendimiento deportivo y en un 99 % en comportamiento político.

Eso no es noticia, pero lo que si quiero aclarar es que no todos los peloteros cubanos son víctimas del sistema, sino que hay muchos que se han aprovechado del sistema sin importarles por sobre quien tengan que pasar o a quien tienen que “echar pa lante”, con tal de gozar de los privilegios que otorga el régimen a quien le entrega incondicional lealtad y sumisión.

Por eso la encuesta de mi amigo Uziel encuentro que es una de las más difíciles de responder, pues toca unos puntos bien espinosos.
En mi caso personal soy de los que tiene sentimientos encontrados, me gustaría un team Cuba vencedora en el Clásico pero si fuera un Cuba puro , y no me gustaría que ganara mientras en sus filas se encuentren defensores a ultranza de la dictadura.
Hay peloteros que solamente se someten a las reglas como hicimos todos en algún momento (esto es comprensible), pero hay otros que se aprovechan de esas reglas para ganar beneficios e inmunidad.

Para ilustrar acudo a ejemplos concretos: recuerdo a Juan Padilla golpeando en la cara a una persona que salió al terreno pidiendo por los derechos humanos, si la memoria no me falla en Baltimore; recuerdo a Germán Mesa en el clásico anterior amenazando cuál matón a los aficionados cubanos en Puerto Rico cuando mostraron carteles “peloteros si, Castro no”, recuerdo a Víctor Mesa dándole con un bate a un fanático en el Cepero sin que pasara nada ni tuviera que responder a la justicia, recuerdo en el mismo estadio a Pedro Luis Lazo lanzarle un cucurucho de maní a un vendedor diciéndole que lo que vendía era una p…….

A Kendry lo regresaron a Cuba a mitad de un torneo porque alguien del equipo informó que pretendía quedarse. En fin, hay muchos ejemplos y en ningún caso a los agresores o informantes les pasó nada, o sea, contaron todos con la inmunidad y los privilegios que les da el régimen y la cuál han aprovechado en su beneficio sin importarles a quién perjudican en el camino.

Afortunadamente esos son los menos, la mayoría de nuestros peloteros están locos por escapar de la prisión, pero mientras permanecen en ella llevan un comportamiento humilde y honorable. Dejo el tema abierto al debate, todos saben de que hablo.