Es un hecho indesmentible que El Duque y Contreras triunfaron en Cuba y en las Grandes Ligas, y que Liván lo hizo en la Gran Carpa.
Del éxito dan cuenta los seis anillos de Serie Mundial, cuatro para El Duque (3 con los Yankee y 1 con los Medias Blancas), uno para Liván (Marlins) y Contreras (Medias Blancas), quienes dieron clases magistrales de pitcheo en las Series Mundiales del 1997 y 2005, respectivamente.
Los dos hermanos ostentan el premio de jugador más valioso en postemporada, y Liván en la Serie Mundial.
Los dos hermanos ostentan el premio de jugador más valioso en postemporada, y Liván en la Serie Mundial.
El Duque y Contreras han sido dos de los mejores lanzadores de la pelota isleña en sus 10 temporadas.
El industrialista mantiene el récord de promedio en ganados y perdidos con 728, y registró 3.05 en más de 1.500 entradas. El pinareño acumuló 2.82 de efectividad en casi 1.500, y promedio de 701.
Liván, en cambio, jugó tres temporadas en Cuba con un ERA de 4.57 en 335 entradas. Integró el equipo nacional dos años y fue líder en lechadas con tres en el 94, lanzando por la Isla de la Juventud.
Al cruzar el charco, Liván se convirtió en un grande. Es uno de los pocos que ha tirado más de 200 entradas en 8 años seguidos y quiere convertirse en el lanzador cubano más ganador en la historia de las Grandes Ligas.
Incluso, mejoró su efectividad en la Gran Carpa con 4.25 en más de 2.300 entradas.
El Duque no ha podido mantener su excelente promedio de ganados y perdidos en la MLB, pero en 1.314 inings (200 menos que en Cuba) su efectividad es de 4.13. Apenas le batean para 239, registra 1086 ponches y 90 victorias.
Con los Yankees tuvo campañas excepcionales, llegando a ganar 17 juegos en 1999. Con los Medias Blancas es memorable el cero que dio en un partido de Serie Mundial al llegar con las bases llenas y sin out.
Contreras subió de 2.82 ERA en Cuba a 4.57 en EE.UU, donde ganó un juego cada 2,4 presentaciones y ponchó a un bateador de cuatro enfrentados.
En la isla, en tanto, la proporción fue de un triunfo cada 1,9 partidos, y abanicó a un bateador por cada 3,2 enfrentados. En 2005 ganó 15 juegos con los Medias Blancas y lanzó para un excelente 3,61. El año pasado anduvo mal con sus 17 derrotas y 5.57 ERA.
Revisen los numeritos.
2 comentarios:
Uziel, sin duda estos muchachos son de lo mejor que ha dado la pelota cubana contemporánea. Les tendremos que agradecer siempre a ellos que el nombre de Cuba se mencionara con letras doradas en las Mayores, pues ya hacia rato que no se hablaba de peloteros cubanos destacados hasta que apareció Liván en el 97. Se sabía de Canseco y de Palmeiro, pero esos no jugaron en Cuba, y en menor medida sonaron en algún momento los nombres de René Arocha Rolando Arrojo, Ariel Prieto y Osvaldo Fernández, pero ninguno tuvo el brillo que tuvo Liván y más tarde El Duque y Contreras. Gracias a ellos quedó demostrado que a pesar de los pesares el pelotero en Cuba se da como el marabú.Saludos, Victor.
Víctor, tenemos que sacarnos el sombrero ante los tres mosqueteros. Nuestra bandera iza más hermosa (y no es un cliché) con cada actuación y triunfo cubano. Creo que tiempos mejores vendrán para nuestra pelota cuando se les permita jugar en la Gran Carpa, estúpida prohibición (como tantas)que se debe terminar pronto, saludos, Uziel
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